El Sindicato de Empleados Judiciales de Neuquén (SEJUN) denunció situaciones de violencia laboral en la Defensoría de los Derechos del Niño, Niña y Adolescente de Zapala y exigió medidas urgentes para garantizar condiciones laborales dignas y seguras para el personal.
Según informó el secretario general del gremio, Claudio Salazar, las denuncias surgieron a partir de exposiciones formales realizadas por empleados del organismo, quienes reportaron malos tratos verbales, sobrecarga de tareas, trato hostil y asignaciones por fuera de sus funciones habituales.
La denuncia fue dirigida a la titular del organismo, Paula Castro Liptak, y también se señaló a la defensora adjunta Natalia Díaz y a la funcionaria Natalia Fuentes como parte de la estructura involucrada en los hechos.
El reclamo ya fue elevado a la defensora general del Poder Judicial, Vanina Merlo, y al departamento de Salud Ocupacional, solicitando una intervención institucional que resguarde la salud mental y el bienestar del equipo de trabajo.
La defensoría en cuestión está integrada por cuatro profesionales, tres funcionarios, seis administrativos y una trabajadora de maestranza. Desde SEJUN advirtieron que el mal clima interno y la falta de medidas correctivas están afectando el funcionamiento general del área y deteriorando el ambiente laboral.
En mayo se convocó una reunión con todo el personal en un intento por mediar en el conflicto. Sin embargo, según indicó el gremio, la instancia no logró resolver las tensiones internas y, por el contrario, habría agudizado el malestar.
“El ambiente se volvió insostenible y la situación requiere una resolución urgente”, indicó Salazar, quien reiteró la necesidad de adoptar medidas concretas para frenar las situaciones de hostigamiento y garantizar un entorno libre de violencia en el ámbito judicial.
