Unión de Zapala inició la temporada con objetivos ambiciosos y una identidad bien marcada. Con una fuerte apuesta por los talentos formados en la institución y la llegada de nueve refuerzos de peso, el equipo busca ser protagonista y pelear por el tan ansiado ascenso.
Bajo la conducción de Daniel Barrera, acompañado por Rubén Cabas y Luis García, el “Canario” ya se entrena con plantel completo. En la lista de incorporaciones destacan jugadores con recorrido en torneos federales y pasos por clubes importantes de la región. Tres de ellos integran la actual Selección de LIFUNE, lo que refleja el nivel del armado.
Entre los refuerzos figuran:
Alan Riquelme, defensor ex Olimpo de Bahía Blanca y seleccionado neuquino.
Alex “Alito” Urrutia, mediocampista central con más de una década en primera.
Germán Sáez, goleador con títulos en Don Bosco y ADZ.
Francisco y Nacho Cechich, defensores con amplio recorrido y convocatoria actual a LIFUNE.
Gonzalo Sáez, volante zurdo con títulos juveniles y experiencia internacional.
Emanuel Garrido, defensor con pasado en Federal A, B y C.
Ezequiel “Langosta” López y Ema Gallegos, dos arqueros con paso por torneos regionales.
A estos nombres se suman valores formados en la cantera como Enzo Bazán, Renato Rubilar, los hermanos Cisneros, Martín Cabas, Kily Huayquillan, Gonzalo Morales y Eze Vera, entre otros.
Con la mira en el ascenso
Unión ya tuvo su debut en el torneo y este domingo enfrentará a Río Grande por la segunda fecha, con la idea de consolidar funcionamiento y sumar puntos.
“Tenemos un plantel competitivo, con jugadores que conocen la categoría y chicos del club que vienen empujando fuerte. Vamos por el ascenso, ese es el sueño de todos”, expresaron desde la dirigencia.
El sueño está en marcha. Unión no quiere ser uno más: va por todo.
