El miércoles (24-04) se conoció que el jefe comunal de Zapala, a través de una nota, les solicitó a los concejales de la ciudad suspender el tratamiento del proyecto que buscaba implementar la tasa vial al combustible. El mismo fue aprobado el lunes (22-04) por unanimidad y este jueves debía realizarse la audiencia pública para poder declarar la emergencia vial y así tener luz verde al cobro adicional de 4,5 % a la carga de combustible.
Sin dar indicios, y con comerciantes, empresarios y la comunidad en contra de la tasa vial, el intendente decidió frenar la medida sorprendiendo a propios y extraños. “La decisión se basa en los aumentos escalonados de los combustibles que se vienen repitiendo durante los últimos meses -explicó en la nota enviada a los ediles-, afectando la economía familiar y productiva de los vecinos de la ciudad”. Koopmann agregó que esos aumentos “por decisión del gobierno nacional continuarían a partir del 1 de mayo como efecto de la aplicación de un nuevo incremento en el Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL)”.
“Este Ejecutivo no es ajeno a la compleja situación socioeconómica que vive el país, con un escenario de recesión, a partir de la depreciación de los salarios con la respectiva caída del poder adquisitivo”, aclaró el jefe comunal, y aseguró que “este panorama impacta claramente en la administración municipal, pero haremos los esfuerzos que sean necesarios, para que no se vea afectado el nivel de prestación de servicios ni los niveles de ejecución de obra pública que estamos llevando adelante y que tienen el claro objetivo de mejorar la calidad de vida de las familias zapalinas”.
La medida de Koopmann deja en una dificil situación a sus pares y compañeros partidarios, Mariano Gaido (Neuquén) y Carlos Saloniti (San Martín de los Andes), que por el momento continúan adelante con la tasa vial al combustible pese al descontento generalizado de vecinos y las cámaras empresariales del sector. El plus a los combustibles también fue aprobado en Plottier, Centenario y Villa Pehuenia.
En Zapala, la tasa vial del 4,5 por ciento que se pretendía cobrar, significaba un ingreso extra de 60 millones de pesos. Al igual que en las demás localidades, ese dinero sería destinado a financiar el sistema de transporte público pasajeros y también a obras de asfalto y bacheo.
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